Médicos especialistas observan el proyecto sobre cuidados paliativos

Médicos especialistas observan el proyecto sobre cuidados paliativos

Profesionales de la Medicina de diferentes organizaciones y casas de salud de Quito expresaron sus opiniones respecto del proyecto de Ley de Cuidados Paliativos, que analiza la Comisión del Derecho a la Salud, previo a la construcción del informe para primer debate.

María Cristina Cervantes, médico tratante de la unidad de cuidados paliativos de Solca Núcleo de Quito, y miembro de la Asociación Ecuatoriana de Cuidados Paliativos (ASECUP), sugirió considerar que el 6.5 % de la población del Ecuador es mayor de 65 años, con mayor riesgo de requerir cuidados paliativos; que la atención al cuidado paliativo no se debe sectorizar; promover el adecuado acceso a medicamentos como lo refiere la OMS.

Sostuvo que se requiere impulsar el suficiente personal en prevención; capacitación clara, específica y obligatoria, que sea avalada por la Senescyt.

Mercedes Díaz, médico internista paliativista del Hospital Solca Núcelo de Quito y coordinadora del Área de Cuidados Paliativos, complementó la información y reflexionó lo que significan los cuidados paliativos como derechos humanos. Dijo que se justifica el respeto de los pacientes, cuando la enfermedad no les devuelva a la etapa productiva.

Reafirmó que al ser un trabajo interdisciplinario se debe especificar las capacitaciones en pregrado en Psicología, Trabajo Social y técnicos afines como Fisioterapia. Añadió que todas estas carreras deberían impartir a sus estudiantes una capacitación mínima en cuidados paliativos. Enfatizó en el reconocimiento del cuidado paliativo como un derecho inalienable de las personas y su familia.

En su calidad de Directora de la Casa del Adulto Mayor Cumbayá Village – Homecare, Michelle Jaramillo, tras mencionar que acompañan al adulto mayor en la etapa final de la vida con equipo interdisciplinario, con respeto y amor, subrayó que el cuidado paliativo es una necesidad actual de primer nivel, por lo que recomendó tomar en cuenta a las organizaciones científicas, a los organismos no gubernamentales, agrupaciones de pacientes y entre todos hacer que la ley sea un sueño cumplido.

Informó que en Ecuador hay más de un millón y medio de personas que tienen más 65 años, lo que representa el 6.5 % de la población total; de estos, más de 14.6 % vive y muere solo; el 14.9 % sufre abandono; y, solo el 9.4 % vive en residencia geriátrica. Planteó que a los centros geriátricos se les permita dar cuidados paliativos; y, como residencias geriátricas se tome en cuenta al nivel público y privado.

En tanto, Alberto Vittorio Redaelli, vicepresidente de la Fundación Ecuatoriana de Cuidados Paliativos, evidenció que junto a Hospice San Camilo han realizado más 23 mil visitas domiciliarias en los últimos diez años. Sin embargo todavía están en una etapa inicial frente a la gran cantidad de pacientes que necesitan asistencia, acompañamiento y cuidados adecuados y oportunos.

Dijo que Hospice San Camilo registró un promedio de 250 fallecimientos cada año y que los cuidados paliativos no se limitan a proporcionar una buena muerte, sino que también promueven una filosofía de una buena calidad de vida. “Hay que humanizar el vivir humano, es una filosofía del buen vivir; debe ser exigencia morir con dignidad; los cuidados paliativos no es para el final, debe ser con enfoque interdisciplinario, global, holístico”, puntualizó.

Hizo algunas precisiones como determinar con mayor claridad los deberes y derechos de los profesionales y los familiares de los pacientes; el derecho a la confidencialidad; a la familia; mecanismos de tiempos y condiciones para el cuidado; que el paciente decida cómo y dónde vivir bien su final, tras asegurar que son los únicos en el país como residencia de cuidados paliativos, en convenio público; no obstante necesitan que se les reconozca el derecho de internación.