El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, acudió hasta el sector de La Mica, en el páramo del Antisana, donde constató los trabajos de remoción de material que realizan alrededor de un centenar de trabajadores, para posteriormente reparar la tubería afectada por un deslizamiento de tierra.
«Mover esto es una barbaridad, es decir, hombres y mujeres han hecho un trabajo muy importante. Están trabajando 24 horas al día, todos los días , manifestó el alcalde.
Cerca de las 11h30 de este domingo, el alcalde llegó hasta el punto cero, vistiendo una chompa, guantes y botas. En medio de la lluvia constante y las bajas temperaturas, recorrió el sitio cubierto de lodo y conversó con el personal técnico y operativo de Epmaps. Se le informó que hasta el momento se ha removido 120.000 metros cúbicos de tierra, es decir, el 67% de lo que se debe despejar (180.000).
Según el avance de los trabajos y debido a la magnitud del deslizamiento de tierra que afectó 350 metros de la tubería, se estima que el servicio de agua potable, en las seis parroquias afectadas del sur de Quito, se restablezca durante el próximo fin de semana.
En medio de la gran cantidad de lodo, el alcalde incluso descendió hasta el sitio donde se encuentra la tubería rota e informó los trabajos que se realizarán, una vez concluya la remoción de tierra.
«Después de esto viene la zanja, con la zanja viene la tubería, que se conecta, se suelda y se hacen las pruebas incluso con mediciones láser para que no haya fisuras» explicó.
Sobre la distribución de agua potable, el alcalde Pabel Muñoz manifestó que se triplicarán los esfuerzos para dotar del líquido vital. «Este mismo momento tenemos cerca de 60 tanqueros», dijo, y agradeció a los municipios, empresas privadas y a todos a quienes se han sumado para atender esta emergencia.
Finalmente, reconoció el trabajo y entrega de todo el equipo municipal. «Todos estamos trabajando sin descanso. Vamos a salir de esto juntos, como ya lo hemos hecho en otras ocasiones» concluyó.
