El pleno del Concejo Metropolitano de Quito, este 19 de marzo, aprobó con 17 votos a favor la entrega de la Mención de Honor por servicios relevantes a la ciudad ‘Manuela Cañizares’ Post Mortem, a la señora Paola Roldán Espinosa, quien impulsó la aprobación de la eutanasia en Ecuador.
El reconocimiento se entrega por su incansable lucha por el derecho a una muerte digna y compasiva.
La propuesta del Acuerdo fue promovida por Pabel Muñoz, alcalde de Quito, y en su intervención señaló que “se reconoce la importancia de la lucha de Paola Roldán que se ve reflejada en un avance normativo para el Ecuador y en la que muchos coincidimos, es muy importante. Paola Roldán planteó como un debate para el marco normativo, me parece sano, valedero, y hoy ya no solo es una causa individual, sino la posibilidad de que muchas personas que sufren tengan la posibilidad de morir dignamente».
El reconocimiento fue entregado por María Fernanda Racines, vicealcaldesa, a Francisco Roldán, padre de Paola, quien expresó “aplaudimos la lucha que realizó su hija por la lucha de los DDHH. Además, tenemos el compromiso como ciudad de Quito por seguir trabajando por los derechos humanos en la ciudad y el país”.
Por su parte, Francisco Roldán, dijo «los sentimientos están a flor de piel, con el profundo dolor por la partida de mi hija Paola, agradezco la condecoración que nos llena de orgullo y que constituye un bálsamo en las horas que vive la familia. Paola levantó la voz e inició la acción para las personas que no tienen voz. Tú, Paola, que estás en el cielo, estás sembrando lo que cosechaste».
En contexto:
Paola Roldán Espinosa padecía una rara enfermedad degenerativa llamada esclerosis
lateral amiotrófica (ELA), que se produce cuando las neuronas se desgastan o mueren y no pueden enviar mensajes a los músculos. A corto y mediano plazo, esta interrupción provoca el debilitamiento de los músculos, contracciones involuntarias e incapacidad para mover los brazos, piernas y el cuerpo; fue diagnosticada con ELA, en 2020, emprendió una campaña de sensibilización a favor de las personas que sufren esta rara enfermedad, que afecta a dos de cada 100.000 personas en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
Sus principios incasables de lucha por sus derechos hicieron que presente una demanda ante la Corte Constitucional, para pedir que se declarara la inconstitucionalidad del artículo 144 del Código Orgánico Integral Penal, que sanciona con penas de entre 10 y 13 años de prisión el homicidio simple, incluyendo los actos de eutanasia.
El 7 de febrero la Corte Constitucional emitió un fallo favorable a su demanda y así logró que el Ecuador sea el noveno país del mundo en despenalizar la muerte asistida en circunstancias extremas.
El 11 de marzo de 2024, sucedió el lamentable deceso de Paola Roldán Espinosa; su valentía y determinación han allanado el camino para un cambio significativo en la legislación ecuatoriana, permitiendo que aquellos que enfrentan condiciones médicas terminales tengan la opción de despedirse con dignidad y sin sufrimiento innecesario.